Los problemas de salud dental en la infancia es fundamental tratarlos cuanto antes, con el objetivo de evitar el desarrollo de problemas más graves y simplificar los tratamientos dentales en el futuro.
La primera consulta con el dentista se debería de hacer en el momento en el que empiezan a salir los primeros dientes temporales o de leche. Gracias a las revisiones periódicas, se puede ir analizando el crecimiento óseo y dental del niño, para detectar de manera eficaz y rápida cualquier anomalía en su desarrollo.
Las anomalías en la cavidad oral del niño, así como en el complejo cráneo-facial, en especial los huesos maxilar y mandíbula, pueden tener origen funcional (uso excesivo de chupete, chuparse el dedo, tipo de respiración), hereditario o puramente esquelético.
La ortodoncia interceptiva, también conocida como ortodoncia funcional, se utiliza para orientar, modificar y controlar el desarrollo óseo del maxilar y la mandíbula.
Este tipo de tratamiento ortodóncico-ortopédico se puede comenzar desde los 3 años, aunque el momento más frecuente de tratamiento suele ser a partir de los 6-7 años ya que es la etapa de crecimiento en la que los huesos de la cara se encuentran en formación y se puede corregir su estructura fácilmente.
Algunas de las señales que pueden indicar la necesidad de este tipo de tratamiento son cuando el niño:
La ortodoncia interceptiva se emplea cuando se detecta de manera precoz y en edad de crecimiento, problemas en el desarrollo de las estructuras óseas. Al estar en edad de crecimiento, estas afecciones todavía se encuentran también en formación y por ello, se pueden corregir de manera más rápida y eficaz que una vez que se haya terminado el desarrollo. Los huesos en edades tempranas son moldeables y los ortodoncistas tenemos la capacidad de redirigir su crecimiento si los estimulamos correctamente .
Todo esto, con el objetivo de evitar anomalías en la estructura maxilofacial y problemas más graves en la edad adulta, así como de asegurar una calidad de vida al paciente desde niño. Esto le permitirá masticar y comer correctamente, respirar sin problemas, eliminar complejos, proteger los dientes de posibles fracturas y permitir un crecimiento adecuado de todo su complejo cráneo facial.
Sin embargo, la ortodoncia correctiva se emplea una vez que todos los dientes de leche se han caído y el problema ya está totalmente formado. Normalmente esto suele ser a partir de los 12 años. Corrige problemas de oclusión y alineación dental a través de aparatos de ortodoncia removibles o fijos, dependiendo de las necesidades de cada paciente.
Según la necesidad de cada paciente, existen diferentes tipos de ortodoncia interceptiva para corregir diversos problemas, como pueden ser:
Todos estos problemas esqueléticos, tratados a tiempo, entre los 7 y los 10 años aproximadamente, tienen una fácil solución. Una vez que el niño se ha desarrollado y ha cambiado todos los dientes de leche a los dientes definitivos, los problemas esqueléticos son bastante más complejos de corregir derivando, en gran parte de las ocasiones, en problemas quirúrgicos que han de ser tratados a partir de los 18 años por un cirujano maxilofacial en combinación con el ortodoncista.
Algunos de los tipos de ortodoncia interceptiva son:
En nuestra clínica dental en Almería estamos especializados, entre otras cosas, en ortodoncia interceptiva, es decir, en ortodoncia para niños. No dudes en contactar con nosotros para cuidar la salud dental de tus hijos o si has detectado alguna anomalía en él de las que hemos explicado.